Por Pedro Borja
Trujillo. Durante la remoción de escombros del muro y parte del techo que cayeron de antiguas aulas de la institución educativa Hermanos Blanco, se supo que el informe hecho por la arquitecta del Instituto Nacional de Cultura recomienda demoler el ala antigua ubicada entre los jirones Ayacucho y Almagro.
El gerente general de la Municipalidad de Trujillo, Manuel Llempén Coronel, verificó que el acarreo del desmonte efectuado por personal y maquinaria edil se hiciera con la mayor prudencia posible, para evitar vibraciones que pudieran afectar la estabilidad de los agrietados y debilitados muros que quedaron en pie.
“Los muros del lado que colinda con Ayacucho necesitan ser apuntalados para darles mayor estabilidad y poder sacar los demás escombros sin mayores riesgos, pero no se puede intervenir hasta que el INC se pronuncie oficialmente”, dijo.
En la última reunión que hubo en la Beneficencia Pública se acordó que la Municipalidad debía retirar los escombros. Estamos cumpliendo con eso y solo queda esperar el pronunciamiento oficial del INC para continuar con los trabajos de apuntalamiento o demolición, agregó.
“Si se opta por apuntalar las paredes la Municipalidad de Trujillo también aportará los materiales necesarios”, puntualizó luego pidiendo un poco de paciencia a los transeúntes y conductores que se vieron afectados por el cierre temporal de esta parte de la calles Ayacucho y Almagro, en tanto se terminaba de recoger los escombros.
“Ojala que no vaya a llover mucho porque esta es una zona de mucho tránsito y la vibración que origina el paso de los vehículos puede traer lamentables consecuencias” enfatizó Llempén Coronel, recordando que los organismos e instituciones relacionadas al tema deben actuar con celeridad para evitar responsabilidades.
Respecto a las declaraciones de Miriam Pilco en el sentido de que se puede continuar utilizando gran parte del local estudiantil, dijo que las autoridades y funcionarios deben seguir las recomendaciones de los técnicos y especialistas en el tema. “Ellos evalúan, hacen sus informes y nosotros debemos acatar lo que parece mas recomendable”, concluyó.
El gerente general de la Municipalidad de Trujillo, Manuel Llempén Coronel, verificó que el acarreo del desmonte efectuado por personal y maquinaria edil se hiciera con la mayor prudencia posible, para evitar vibraciones que pudieran afectar la estabilidad de los agrietados y debilitados muros que quedaron en pie.
“Los muros del lado que colinda con Ayacucho necesitan ser apuntalados para darles mayor estabilidad y poder sacar los demás escombros sin mayores riesgos, pero no se puede intervenir hasta que el INC se pronuncie oficialmente”, dijo.
En la última reunión que hubo en la Beneficencia Pública se acordó que la Municipalidad debía retirar los escombros. Estamos cumpliendo con eso y solo queda esperar el pronunciamiento oficial del INC para continuar con los trabajos de apuntalamiento o demolición, agregó.
“Si se opta por apuntalar las paredes la Municipalidad de Trujillo también aportará los materiales necesarios”, puntualizó luego pidiendo un poco de paciencia a los transeúntes y conductores que se vieron afectados por el cierre temporal de esta parte de la calles Ayacucho y Almagro, en tanto se terminaba de recoger los escombros.
“Ojala que no vaya a llover mucho porque esta es una zona de mucho tránsito y la vibración que origina el paso de los vehículos puede traer lamentables consecuencias” enfatizó Llempén Coronel, recordando que los organismos e instituciones relacionadas al tema deben actuar con celeridad para evitar responsabilidades.
Respecto a las declaraciones de Miriam Pilco en el sentido de que se puede continuar utilizando gran parte del local estudiantil, dijo que las autoridades y funcionarios deben seguir las recomendaciones de los técnicos y especialistas en el tema. “Ellos evalúan, hacen sus informes y nosotros debemos acatar lo que parece mas recomendable”, concluyó.
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