Trujillo (Perú). El centro nocturno “Tributo Bar”, ubicado en la esquina del jirón Francisco Pizarro con Diego de almagro, en la esquina sur- oeste de la plaza mayor, anoche fue intervenido por personal del Servicio de Gestión Ambiental de Trujillo (Segat), por emitir ruidos que alcanzaron en el decibelímetro, los 80 decibeles. Un grupo musical casi a diario desde las seis de la tarde empieza con música y cantos estridentes, que por la intensidad del ruido causan malestar a los transeúntes y vecinos y también es un abierto desafío y falta de respeto a las autoridades municipales, que están a escasos 20 metros de distancia causándoles malestar. El local Tributo Bar ya había sido inspeccionado por Defensa Civil de la MPT y le hizo observaciones, pero la emisión de ruidos nocivos ha continuado y en esta oportunidad los hizo el Departamento de Fiscalización del Segat, al mando de abogado Mario Miranda Jara. Como resultado de la intervención se levantó un acta y se dio 48 horas de plazo para eliminar la emisión de los ruidos nocivos, que de no cumplirlo se aplicará la sanción correspondiente, dijo el funcionario del Segat.De acuerdo a la Ordenanza Municipal vigente, en el centro histórico, donde hay hospital y clínicas, en el horario diurno hasta las 10.00 p.m. solo se puede emitir sonidos hasta 50 decibeles, en el horario nocturno de las 10.00 p.m. hasta el amanecer es permitido emitir ruidos hasta los 40 decibeles. Después de levantarse el acta, los integrantes del grupo musical, con sus instrumentos desalojaron el local y se restableció el necesario silencio en esta parte del centro histórico de la ciudad.
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